
El proyecto ferroviario que conectaría a la Ciudad de México con Puebla y Veracruz ha sido descartado del plan de infraestructura federal, según confirmó Andrés Lajous Loaeza, titular de la Agencia Reguladora de Transporte Ferroviario (ARTF), durante la conferencia matutina del pasado 9 de julio.

Durante su participación, Lajous presentó los 13 proyectos ferroviarios que conforman los más de 3 mil 300 kilómetros de nuevas vías que serán construidos en el sexenio de Claudia Sheinbaum. Todos están distribuidos en cuatro fases, pero ninguno contempla la ruta México–Puebla–Veracruz.
La ausencia del proyecto fue clara desde la creación de la Agencia de Trenes y Transporte Público Integrado —órgano descentralizado encargado de la planeación, construcción y supervisión del sistema ferroviario nacional—, el cual no lo incluye en ninguna de sus etapas.
Las rutas contempladas son:
- Etapa 1 (785 km):
- AIFA–Pachuca
- Ciudad de México–Querétaro
- Saltillo–Nuevo Laredo
- Querétaro–Irapuato
- Etapa 2 (956 km):
- Querétaro–San Luis Potosí
- Mazatlán–Los Mochis
- Irapuato–Guanajuato
- Etapa 3 (1,145 km):
- Guaymas–Hermosillo
- Guadalajara–Tepic
- San Luis Potosí–Saltillo
- Los Mochis–Guaymas
- Etapa 4 (552 km):
- Tepic–Mazatlán
- Hermosillo–Nogales
Con ello, se confirma que el tren México–Puebla–Veracruz ha sido descartado de los proyectos prioritarios de la administración federal, pese a que la presidenta Claudia Sheinbaum había anunciado en enero pasado que su construcción iniciaría en 2026.
Sin respaldo federal, sólo un cablebús para Puebla
El único proyecto federal relacionado con Puebla que recibió respaldo fue un sistema de cablebús, que contará con acompañamiento técnico por parte de la nueva Agencia de Trenes y Transporte Público Integrado.
Esto contrasta con las declaraciones previas del gobernador Alejandro Armenta, quien aseguró que el tren México–Puebla–Veracruz se encontraba bajo análisis, e incluso que el Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras) sostenía pláticas con el Gobierno estatal para evaluar su viabilidad.
Un proyecto ambicioso, pero nunca prioritario
Desde su planteamiento, el tren México–Puebla–Veracruz vivió un escenario incierto. Su primera exclusión ocurrió durante la presentación del Plan México. Posteriormente, el general Gustavo Ricardo Vallejo Suárez, comandante del Agrupamiento de Ingenieros “Felipe Ángeles”, reiteró en febrero que el proyecto no era una prioridad del sexenio.

“El proyecto es muy ambicioso, pero seis meses antes de que acabe la administración, tenemos que dar resultados al país. Tenemos que tener las líneas férreas de Ciudad de México a Querétaro; la de Querétaro a Guadalajara terminada; la extensión del tren de pasajeros del AIFA a Pachuca y la infraestructura de carga”, declaró entonces.
Además, nunca hubo claridad sobre si el proyecto sería ejecutado por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), como ha sucedido con otros grandes desarrollos ferroviarios.
De esta forma, se disipan las expectativas de que esta conexión ferroviaria entre Ciudad de México, Puebla y Veracruz comience durante el sexenio de Sheinbaum. El megaproyecto queda oficialmente fuera de las prioridades federales.